Extendiendo la Doctrina Apostolica

jueves, 30 de junio de 2011

Unicidad vs trinidad

Paz de Cristo!!! Este es un debate sobre la Palabra de Dios desde el punto de vista de la Trinidad vs. el punto de vista de la Unicidad. 




“Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él” (Colosenses 3:17).

La Trinidad

¿La Doctrina de la Trinidad Define Correctamente la Divinidad?

Quiero invitarlos a que vean este vídeo.


Plan de Salvación

Nombre de Jesús

En este video usted podrá aprender sobre el verdadero bautismo en agua, de acuerdo con la Palabra de Dios.

miércoles, 29 de junio de 2011

Plan de Salvación

La Llenura del Espíritu Santo



"Nicodemo tenía que nacer otra vez: del Espíritu: "... te es necesario nacer del Espíritu", porque: "Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es" (Jn.3:6).

Esto es sumamente importante saberlo y tenerlo bien en cuenta, pues, la Biblia lo enseña claramente. El nuevo nacimiento sólo se realiza por la obra poderosa del Espíritu Santo cuando viene a la vida de una persona convertida, y lo bautiza, y lo hace una completa nueva criatura. ¡Esa obra no es posible a menos que el Espíritu Santo venga sobre la persona!

El bautismo con el Espíritu Santo significa la Presencia de Dios mismo dentro de la vida del creyente. No debemos dar lugar al conformismo, que es una argucia de Satanás para hacer que los creyentes no se preocupen por buscar en oración la promesa del Espíritu Santo, apoyándose sobre la falsa base de algunos cambios de conducta, de comportamiento, de actitudes que se hayan experimentado, los cuales sólo están probando que se ha dado una conversión, que es obra del Espíritu Santo, Quien actúa sobre la vida del individuo con Su poder para hacerlo apto para el Bautismo con el Espíritu; pero esa obra que opera tales cambios no es la totalidad de lo que Dios quiere hacer con una persona que cree en Él. ¡Dios quiere también hacerlo Su templo, Su habitación o morada!

Es clara la Escritura al decirnos que: "... para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare." (Hch.2:39).

La obra del Espíritu Santo en el individuo se realiza en tres fases:

a.   Al llamarlo al reino, lo convence "de pecado, de justicia, y de juicio" (Jn.16:9‑11). Esto se cumple cuando el Espíritu Santo obra convenciendo a la persona por la predicación del Evangelio, a través del cual lo mueve al arrepentimiento y a la conversión, que es cuando se operan los cambios fundamentales de la vida y carácter del nuevo creyente, y luego lo conduce a la obediencia del bautismo en agua en el Nombre de Jesucristo para perdón de los pecados, haciéndolo apto para recibir el Bautismo del Espíritu Santo, hablando en otras lenguas como señal de esa experiencia gloriosa, que podemos calificar como la culminación, o mejor la cima, de esa obra iniciada con el llamamiento, arrepentimiento y bautismo en agua.

b.   De ahí en adelante, el Espíritu  Santo  continúa Su obra desde dentro de la vida, del corazón del creyente, guiándolo, dotándolo de poder. Esta es una fase de perfeccionamiento del creyente. En Jn.16:13, leemos: "... cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad..."; y en Hch.1:8, "pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo..." Eso es el Bautismo con el Espíritu Santo: recibir el Espíritu Santo.

c.    En esta tercera fase el Espíritu Santo permanece en el creyente. "... y estará en vosotros." (Jn.14:17). ¡Eso es lo que entendemos por la llenura del Espíritu! El Bautismo con el Espíritu Santo ocurre una sola vez; pero la llenura ‑ser llenos con el Espíritu Santo‑ es algo de diaria ocurrencia y sólo es posible si Él permanece en nosotros, con nosotros, y sobre nosotros.

¡Cómo y cuánto necesitamos al Espíritu Santo de Dios! ¡Recibir el Espíritu Santo!"

Plan de Salvación

El Verdadero Plan de Salvación Según el Nuevo Testamento

 

LA MANERA EN QUE JESÚS PROCLAMÓ CÓMO SERÍA:

"y les dijo: Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos al tercer día: (1) y que se predicase en su nombre el arrepentimiento (2) y el perdón de los pecados en todas las naciones comenzando desde Jerusalén . Y vosotros sois testigos de estas cosas. He aquí, (3) yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto" - Lucas 24:46-49


LA MANERA EN QUE PEDRO LO PREDICÓ:

"Pedro les dijo: (1) Arrepentíos, (2) y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados, y (3) y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos , y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare." - Hechos 2:38-39


¿POR QUÉ ESPERAR? ¡OBEDEZCA HECHOS 2:38! 

 
 PASO 1

TENGA FE EN CRISTO JESÚS COMO SU SALVADOR Y ARREPIENTASE


• Crea que Jesucristo es el Señor y que murió por usted.

• Arrepiéntase de sus pecados y reconozca la necesidad de su salvación, como lo enseña Hechos 3:19.

• Determine apartarse del pecado para vivir en vida nueva.


PASO 2

SEA BAUTIZADO POR INMERSIÓN EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO


• Sea sepultado juntamente con él, sumergiéndose completamente en el agua.

• Deje que el nombre salvador de Jesucristo sea invocado sobre usted como en Hechos 22:16.

• Obtenga la remisión de los pecados obedeciendo al bautismo y a la fe en su nombre.


PASO 3

RECIBA EL BAUTISMO DEL ESPÍRITU SANTO CON LA EVIDENCIA DE HABLAR EN OTRAS LENGUAS


• Reúna los requisitos de arrepentimiento, fe y obediencia.

• Crea que Dios lo ha prometido y que usted puede recibirlo como en Hechos 2:4.

• Entienda que las lenguas son la evidencia inicial de recibir el regalo del Espíritu Santo.

viernes, 24 de junio de 2011

¿La Historia de la Iglesia es un Arma Contra los Apostólicos de la Unicidad?


Los trinitarios han dicho que el estudio de la Historia de la Iglesia es una de sus principales armas contra los pentecostales apostólicos. Este es un desgastado argumento contra nosotros, con el cual se ha dicho que rápidamente nos ponemos a tambalear. Algunos han argumentado que si Jesús dijo: "Las puertas del infierno no prevalecerán contra la Iglesia…" ¿Entonces por qué parece haber una incompatibilidad con el apego a la Unicidad por parte de los creyentes a lo largo de la historia de la Iglesia? Entonces la pregunta es: ¿Es verdad que la historia de la Iglesia es un arma contra nosotros como Apostólicos y gente de la Unicidad?

Una mirada más detallada a este argumento (y a aquellos que lo secundan), nos muestra que los prejuicios teológicos de los trinitarios los conducen no solo a malinterpretar las Escrituras, sino que también los llevan a malinterpretar la historia. Hay un gran número de estudiosos e historiadores, que son cada vez más honestos en su evaluación de los hechos históricos. La idea de que la Trinidad fue aprobada de manera uniforme desde los primeros tiempos de la iglesia, o incluso después, no es sostenible en la mayoría de los círculos teológicos de hoy. [Véase por ejemplo: La Cristología del Nuevo Testamento de Oscar Cullman, Cristología en Formación de James D. G. Dunn, La Fe Cristiana de Hendrikus Berkhof, La Temprana Experiencia de lo Divino de Luke Timothy Johnson, y muchos otros].

Incluso, escritores trinitarios de la antigüedad, reconocieron que sus creencias particulares no eran indicativas de la mayoría de los creyentes de su tiempo, esto aun en doctrinas relacionadas con la divinidad y la salvación, que fueron consideradas por la mayoría de creyentes como invenciones corruptas, pues la mayoría de los creyentes se ajustaban a otros puntos de vista. Por ejemplo, Tertuliano dijo en su obra "Contra Práxeas", que la mayoría de la gente de su tiempo rechazó sus opiniones (las de Tertuliano). Dijo que la "mayoría de los creyentes", a quienes catalogó como "gente sencilla", fueron adversas para creer a su doctrina de una pluralidad de tres personas en la Deidad. Esto demuestra que Tertuliano no se contaba dentro de la mayoría de los creyentes de los siglos segundo y tercero.

También hay que recordar que la historia la escriben los “vencedores”. Cuando el punto de vista trinitario se convirtió en la posición popular en varios lugares y tiempos, aquellos líderes trinitarios a menudo asesinaron a sus opositores y quemaron sus obras. Usted podría haber sido asesinado por tener la copia de un "libro prohibido". El hecho de que ciertos documentos hayan sido citados a pesar de estar en la lista de libros prohibidos, muestra que estos tuvieron gran influencia, y que la gente estaba dispuesta a preservar estas obras, aún cuando esto pudiera significar un peligro personal.

La mayoría de los que sugieren que nos vemos perjudicados por el argumento de que la Historia de la Iglesia es una de las principales armas contra los apostólicos de la Unicidad, no podrían sostenerse de pie al levantar este mismo argumento polémico contra sí mismos. Si el mayor número de seguidores fuera el que hiciera verdadera a una cierta doctrina, entonces tendríamos que ser católico-romanos, o quizás identificarnos con los musulmanes. Así, la mayoría de nuestros contradictores caerían como presa de la misma espada que ellos levantan contra los Apostólicos. Pero nosotros nos basamos en el principio de la “Sola Scriptura”, que dice que la Escritura es la única norma para la doctrina. Un estudio de la Historia de la Iglesia, demostrará que en todas las edades siempre ha existido gente que ha creído en la Unicidad de Dios. El punto es que no importa que muchos se aparten de la verdad, la Palabra de Dios es nuestra norma.

Unicidad de Dios

Jesucristo, Verdadero Hombre y Verdadero Dios

Por Marco González
Tomado del libro “Hermenéutica Bíblica: Módulos de Clase”, Guía No. 23, páginas 43-45


Jesús es único y no hay nada que pueda compararse con Él. La historia de la humanidad es incomprensible sin Cristo. Pero Cristo es incomprensible si no se aprecian en Él dos naturalezas, la divina y la humana. Si se mira a Jesucristo como Dios solamente, se tiene la mitad de la verdad. Lo mismo ocurre si se le mira solamente como hombre. Jesús es Dios manifestado en carne: es tan hombre como si nunca hubiera sido Dios y tan Dios como si nunca hubiera sido hombre. Aún así, su humanidad no puede ser separada de su Deidad, ni su Deidad puede ser separada de su humanidad. Jesús es Dios verdadero y hombre verdadero. En la encarnación, la Deidad y la humanidad se unieron inseparablemente en Jesucristo, y así Él es a la vez completo hombre y completo Dios (no una parte de Dios, no un componente de Dios, no una persona divina y distinta de otras).

1. JESUCRISTO COMO HOMBRE

- Jesús fue hombre, porque lo primero que usted encuentra en los evangelios es una genealogía. La genealogía que aparece en el evangelio según Mateo es la que viene por medio de José, su padre adoptivo. En cambio la genealogía que aparece en el evangelio según Lucas, es la genealogía de María.

- Hay detalles bien humanos acerca del nacimiento de Jesús. Por ejemplo los pastores de Belén encontraron al niño envuelto en pañales (Lucas 2:12).

- Estuvo sujeto a las leyes del crecimiento (Lucas 2:52).

- Jesús tenía un cuerpo humano. Aun después de la resurrección es un hombre con un cuerpo humano glorificado (Lucas 24:36-40, Filipenses 3:20-21).

- Jesús demostró que Él tenía un alma, ya que tenía sentimientos. Por ejemplo, se angustió en gran manera cuando supo que su camino a la cruz era inevitable (Mateo 26:37-38, Marcos 14:34). Lloró cuando se enteró de la muerte de Lázaro (Juan 11:35); fue amigo (Lázaro era uno de sus mejores amigos); tuvo ira cuando expulsó a los mercaderes del templo (Marcos 11:15-19), etc. El alma de Jesús no fue dejada en el hades (Salmo 16:10, Hechos 2:27).

- Gozó de otras características propias del ser humano. Por ejemplo, tuvo hambre (Mateo 4:2), le dio sed (Juan 19:28), se cansó (Juan 4:6), le dio sueño (Mateo 8:24).

- Tenía espíritu humano (Lucas 23:46).

- Finalmente la Biblia enseña que “hay un sólo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre” (1. Timoteo 2:5). Esto enseña que es la obra de Cristo como hombre, el cual al igual que los demás fue tentado en todo con la diferencia de que no cometió pecado (Hebreos 4:15), la que acerca a los hombres a Dios. Con tan sólo poner la fe en su obra redentora en la cruz del calvario y creer que su sangre nos limpia de todo pecado, somos salvos. Además en la epístola a los Hebreos 2:14 dice:

“Así que por cuanto los hijos participaron de carne y sangreEl también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es al diablo”.

A pesar de todo esto, la Biblia no describe físicamente al hombre Jesús, pues para los escritores es más importante la obra que realizó y sus milagros, que su apariencia. Imágenes como el divino rostro, el sagrado corazón o el divino niño, han conducido a la humanolatría.

NOTA: Dado que Jesús experimentó todo lo que nosotros sentimos como seres humanos, Él nos puede entender cabalmente y compartir nuestras alegrías y pesares.

2. JESUCRISTO COMO DIOS

No fue necesario que transcurriera mucho tiempo para que las personas que conocieron a Jesús, comprendieran que Él estaba haciendo declaraciones sorprendentes con respecto a sí mismo. Se comprende, sin lugar a dudas, que sus propias declaraciones le identificaban con alguien que era mucho más que un simple profeta o maestro, pues se presentaba como la única fuente para el perdón de los pecados, como el único camino de salvación y como el único medio para la comunión con Dios.

Una buena definición de Dios puede ser la siguiente: “espíritu supremo existente por sí mismo, e infinito en todo género de perfecciones... Como nadie lo ha creado, Él es la causa de todo”. Esta definición es adecuada para todos los teístas, incluyendo entre ellos a los musulmanes y a los judíos. El teísmo enseña que Dios es un ser diferente de la creación y que el universo fue planeado y creado por Él. Dios lo sustenta y lo gobierna en el presente. El teismo cristiano agrega una nota a la anterior definición: “y quien llegó a encarnarse como Jesús de Nazareth”.

Jesús es Jehová. El profeta Isaías enseña que Dios mismo vendría y nos salvaría (Isaías 35:4). El nombre de Jesús significa Jehová el salvador. En Isaías 43:25 se dice que el único que tiene poder para perdonar pecados es Jehová, pero en los evangelios Jesús se toma esta atribución (Marcos 2:5 y Lucas 7:48-50).

- 1. Timoteo 3:16 dice: “E indiscutiblemente grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, justificado en el espíritu, visto de los ángeles, predicado a los gentiles, creído en el mundo, recibido arriba en gloria”.

- El Nuevo Testamento presenta claramente a Cristo como Dios. Los nombres que se le aplican son de tal naturaleza que sólo pueden ser aplicados apropiadamente a Dios. Por ejemplo, a Jesús se le llama Dios en la siguiente declaración: “... aguardando la esperanza bienaventurada y la aparición gloriosa de nuestro gran Dios y salvador Jesucristo” (Tito 2:13; compárese con 1. Juan 5:20-21, Romanos 9:5, Hebreos 1:8).

- Las Escrituras le atribuyen características que sólo pueden ser ciertas respecto a Dios. Jesús es presentado como un ser existente por sí mismo(Juan 10:17-18); como el Creador y Sustentador de todas las cosas (Colosenses 1:15-17); Omnipresente (Mateo 28:20; 18:20); Omnisciente(Juan 4:16; 6:64; Mateo 17:22-27) Omnipotente (Apocalipsis 1:8; Lucas 4:39-55, 7:14-15; Mateo 8:26-27) y como el poseedor de la vida eterna(1. Juan 5:11- 12, 5:20, Juan 1:4).

- Jesús recibió el honor y la adoración que sólo Dios debe recibir. En un encuentro que tuvo con Satanás, le dijo: “vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás y a Él sólo servirás”. Jesús recibió adoración como Dios (Mateo 14:33; 28:9), y algunas veces exigió que se le adorara como Dios (Juan 5:23; compárese con Hebreos 1:6, Apocalipsis 5:8-14).

- La mayoría de los seguidores de Jesús fueron judíos devotos que creían en un Dios verdadero. Eran monoteístas puros y radicales. No obstante le reconocieron como al Dios encarnado. (Pedro en Mateo 16:15-16; Marta la hermana de Lázaro en Juan 11:27; Natanael en Juan 1:49; Juan el Bautista en Lucas 3:22; Tomás en Juan 20:26-29, Pablo en Hechos 20:28).

- El evangelio de Juan describe una acalorada discusión (Juan 5:1-18, hacer énfasis en los últimos tres versículos). Cuando estudiamos un documento hemos de tener en cuenta el lenguaje, la cultura y especialmente la persona o personas a las que se dirigió. En este caso la cultura era la judía, y a las personas a las que se dirigió eran los dirigentes religiosos. Veamos como comprendieron los judíos lo que les dijo Jesús hace 2000 años en su contexto cultural. “Por esto los judíos aún más procuraban matarle, porque no sólo quebrantaba el día de reposo, sino que también decía que Dios era su propio Padre, haciéndose igual a Dios”. ¿Por qué esa reacción tan drástica? Porque Jesús dijo “mi Padre”, no dijo “nuestro Padre”; y luego agregó: “hasta ahora trabaja”. Estas dos expresiones que Jesús usó lo hacen el mismo Dios, pues obra en el nivel de actividades de Dios. Los judíos no se referían a Dios mediante la expresión “mi Padre” y en el caso de que lo hicieran, le agregaban el modificativo “que está en los cielos”.

- Jesús no sólo afirmó ser igual al Padre, sino que sostuvo que el Padre y Él eran uno y el mismo (Juan 10:30-33). Por esta causa lo iban a apedrear argumentando que Él siendo hombre se hacía Dios. Podríamos preguntarnos por qué hubo una reacción tan violenta cuando Jesús dijo que Él y el Padre eran uno solo. Una implicación interesante surge de esta declaración cuando se estudia el texto griego. La palabra “uno” en griego es de género neutro, no masculino, y no indica que son uno en propósito, sino uno en esencia y naturaleza, un solo Ser. Como Hijo es el hombre perfecto, pero como Padre es el Dios Creador. Esta tajante declaración es el clímax de las afirmaciones de Cristo. Tales declaraciones despertaron en los fariseos una ira incontrolable.

- Jesús habló continuamente respecto de sí mismo en el sentido de que Él es Dios. Él afirmó osadamente: “si a mí me conocieseis, también a mi Padre conoceríais” (Juan 8:19); “el que me ve, ve al que me envió” (Juan 12:45); “el que me aborrece a mí, también a mi Padre aborrece” (Juan 15:23); para nombrar unos pocos casos.

- “Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre y nos basta. Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros y no me has conocido Felipe? El que me ha visto a mí ha visto al Padre; ¿cómo pues, dices tú: Muéstranos al Padre? (Juan 14:9).

Nótese aquí este importante detalle. Jesús hablaba mucho acerca del Padre. Esta idea confundía hasta a sus discípulos, y por esto Felipe declara las palabras arriba citadas. Jesús hubiera podido perfectamente haberle dicho: No te puedo mostrar al Padre, pues Él es Espíritu y está en los cielos. Pero su respuesta fue tajante y demostraba sin lugar a dudas que Él era el Padre. El Dios eterno estaba allí encarnado en la persona de Jesucristo.

* Algunas notas fueron tomadas del libro "Más que un Carpintero" por Josh McDowell

martes, 7 de junio de 2011

Pequeña Historia de la Iglesia

El 21 de enero de 2009 la obra de Dios se inició en Quetzaltenango, y en esta imagen podemos ver que se esta entregando la Iglesia al misionero Marco González.

 el 28 de enero de 2009 se celebró el primer culto, estos son los primeros hermanos de la Iglesia. 
 La primera actividad sectorial celebrada en Quetzaltenango, el 23 de mayo 2010
 Estos son los primeros bautizmos de la Iglesia realizadas por el ministro Marvin Morataya invitado especial, el 17 de julio de 2010 (Hechos 2:38) "Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucrito para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo".
Este es el pueblo del Señor, y creemos que El añadirá cada día a su Iglesia los que han de ser Salvo.
Familia Pastoral.
Que Dios prospere este ministerio y que los use grandemente, y que sean de mucha bendición a todos los que le rodean